miércoles, 18 de diciembre de 2013

miércoles, 11 de diciembre de 2013

sábado, 7 de diciembre de 2013

El Disparo de Fonendo Escopeta: Lo leo y no me lo creo...





Lo leo y no me lo creo... 
El nuevo disco de Saxon, Unplugged and Strung Up, lleva sólo 500 copias vendidas en la primera semana a la venta en Estados Unidos... 

¿Pero qué coño les pasa a los guiris? ¿Se han vuelto todos gafa-pastas definitivamente? ¿O es que ver a Miley Cyrus, una líder infantil made in Disney, convertida en una zorra mediática les ha achicharrado las meninges?
En esto de la música, para obtener reconocimiento masivo, no vale con ser un grupo honesto, que crea grandes canciones -muy importante-, ni tener una trayectoria irreprochable, ni patearse los escenarios año tras año... No, lo importante es tener la piel tersa, un culo saltarín y unas melodías sosas de manual.
En las cajas de mi tienda hay decenas de discos de Saxon, joyas del heavy metal y el hard rock. Algunos son auténticas obras maestras, joder, unas canciones cojonudas. 





Su último trabajo es una colección de clásicos regrabados en acústico o con una orquesta de apoyo. Nuevos matices para viejas canciones.



Vale, no son temas nuevos, pero 500 copias en una semana me parece un insulto.
Mira que me gusta mucha de la música que nació en los States, pero a veces se les va la olla; o se inventan una joya como el Appetite for Destruction o te dan por saco con el puto grunge...



lunes, 2 de diciembre de 2013

¿Puedo pinchar una?





¿Puedo pinchar una?


Sucede en las plantas y en los animales, en los edificios de viviendas y las urbanizaciones de lujo, en Baqueira Beret y en Xanadú, en las casas de citas de lujo y los antros de carretera... todo está categorizado y catalogado.

Este es el típico momento en el que algún listo salta y espeta:

Las personas somos incatalogables, cada uno tenemos un mundo inter...

¡Zas! guantazo en toda la boca.

Vete a la mierda amigo. Todos, absolutamente todos, catalogamos y categorizamos. Y para demostrarlo, voy a hacer un ejercicio con vosotros, los que no tenéis nada mejor que hacer que leer esto. Vamos a catalogar a la gente que podemos encontrarnos en una fiesta en una casa. Vamos a tirar de perfiles que seguro que todos conocéis. Eso demostrará mi teoría.

Comencemos por uno de los perfiles más importantes en una fiesta; el/la "parte-y-reparte-partículas". Como a buen entendedor pocas palabras bastan, no definiré aquí su labor principal, pero supongo que todos sabéis que este es un papel que suele desempeñar una persona, o quizás dos. Lo normal es que este papel, una vez adjudicado, quede ya fijo en el sujeto para el resto de los eventos festivo-lisérgicos.

Alrededor del "parte-y-reparte-partículas" siempre hay una legión de los conocid@s como "come bolsas". La versión estupefaciente del gorrón.

"El que pincha". A mi entender, el gran héroe/heroína de la fiesta. Siempre y cuando lo haga bien, claro. Al igual que sucede con l@s "parte-y-reparte-partículas" este rol puede también dividirse entre varias personas. Normalmente las fiestas son mejores, cuantos más pinchas de calidad y criterio hay en la sala. Saben qué música pinchar y lo que la gente quiere y necesita. Es prescriptor y movilizador y por lo tanto garantiza siempre dos o tres temones de esos que rápidamente te apuntas en el iPhone.

Y ya que hablamos del motor musical de las fiestas, porque no hacerlo del pincha esporádico o también conocid@ como ¿puedo pinchar una?

Este perfil puede salir rana o salir de puta madre, la cuestión es cual de ellas será. Los momentos tensos de espera mientras el pincha esporádico enchufa su smartphone pueden llegar a ser eternos. ¿Qué va a pinchar?
De nada sirven las advertencias previas con las que tratas de avisar al tip@ del ambiente y estilo musical de la fiesta. Va a pinchar el tema que se le haya puesto en su santo centro neurálgico.

¿Tan complicado es entender que si estamos escuchando techno no puedes poner de repente una canción de pop ochentero?

¿Estás imbécil? ¿Te falta un hervor? ¡Insensato! Si no te mato yo, mis amigos lo harán por mi, y lo bueno es que hasta se encargarán de deshacerse del cadáver. Tengo unos amigos cojonudos.

Antes de cambiar de perfil, dos normas básicas para los que os adentráis en el delicado y sórdido mundo del pincha de la fiesta:
1) Los temas no se cortan. Si has metido la pata con uno, y hay que cambiar urgentemente de canción, haz un fundido para quitarla y otro fundido para poner la nueva, los cortes bruscos no molan y cortan el rollo.
2) Los grandes silencios entre canción y canción también cortan el rollo, ten el tema pensado con suficiente antelación y si no eres capaz, búscate otro perfil que ocupar.

Llegamos ahora al gran marrón de la fiesta, él único que te hace gritar eso de "a tu puta casa" (esto es un homenaje particular a un amigo). Hablamos amigas y amigos, del TORPE de la fiesta.

Una vez más, este papel se encuentra a partes iguales entre ellas y entre ellos, no hay más torpes hembras o machos, aquí sí hay igualdad. La torpeza normalmente va ligada a una mala asimilación de ciertas sustancias, y digo yo, si sabes que haces el imbécil cuando bebes o cuando tomas otras cositas, ¿por qué lo haces? ¿No es acaso una postura terriblemente egoísta? Al final el marrón siempre se lo comen una vez más los amigos.

En algún momento de la noche el/la torpe se da cuenta de que no cae muy bien, nota que a pesar de sus esfuerzos por hacer gracia, lo único que percibe son caras que dicen: Déjame en paz, por favor. Es aquí cuando el torpe, se aferra a una de las decisiones más absurdas y estúpidas que he visto en mi vida:

(Torpe pensando) Como veo que no estoy en el rollo que todos los demás, voy a ver si drogándome y bebiendo un poco más, consigo encajar.

Fantástico. Tu madre tiene que estar orgullosisima.

El torpe hace comentarios fuera de lugar, se comporta como un gracioso cuando en realidad es tedioso, molesta, estorba, incomoda con sus constantes quejas y aspavientos. En otras palabras, es la mosca cojonera del que todo el mundo quiere librarse.

Por eso, si estás leyendo estas líneas y te estás dando por aludido, por favor, reflexiona... y deja de romperme los vasos que aunque los compro en el chino, cuestan pasta. La próxima vez que identifique a un torpe en mi casa, le doy un vaso de plástico y escribo su nombre en él.

Sé que también podríamos hablar de los amigos leales que a lo largo de la noche comparten contigo miradas cómplices para asegurarse de que todo va bien. Maravilloso. O podríamos hacer mención a esa persona amig@ de un amig@, que apenas conoces y que aun así se ha metido en tu cama para dormir debido a la grandisima melopea que llevaba. Tampoco podemos olvidarnos del que no para de decirte que tu fiesta es la hostia o de la "performer"... en fin... seguro que me dejo muchos otros perfiles, pero como es lunes y ya he escrito muchísimo, prefiero dejarlo aquí.

Insane in the brain